miércoles, 24 de marzo de 2010

genuflexión a la carta

Hace un año, tal día como hoy, estaba en la Plaza da Mayo de Buenos Aires de manifestación. Desde el otro lado del charco quiero mandar mi apoyo a todas las Madres y Abuelas, para que se haga justicia de una vez por todas y puedan ser ajusticiados todos los responsables de las atrocidades de la dictadura.

Tras esta breve introducción en recuerdo de mi Argentina querida, paso a España, vieja y maltrecha nación. Cuando uno observa las cifras del paro se queda, cuanto menos, perplejo y asombrado de su imparable evolución. Pero lo que me deja más perplejo aún no es el número de personas que están sin empleo, sino el amodorramiento instaurado en ésta, nuestra sociedad. Joder, que en otros tiempos, con un veinte por ciento de desempleo, se preparaba la de Dios es Cristo. In illo tempore había sindicatos, sí, sí, digo bien, sindicatos, que se preocupaban por el bienestar de los trabajadores y, de vez en cuando, te montaban una huelga general que se cagaba la perra. Que luego los gobiernos de turno hicieran el caso que hicieran, allá ellos, pero por lo menos existía una cierta movilización donde se mostraba el descontento de buena parte de los ciudadanos. Hoy na de na. Subsidios, caramelitos, buenas palabras,... y te dan por el culo. Y lo peor es que te van avisando de que te la van a meter bien metida.

Señor Rodríguez Zapatero, señores gerifaltes de los sindicatos, patronos con megabeneficios, políticos a sueldo de la Unión Europea -¡valiente unión!-: que les den por el ojete.

2 comentarios:

Adobao dijo...

Mu bien hablado, pero que les den por el culo tambien.Me gusta tu forma de pensar!!!! (sobre este tema claro esta)

PABLO dijo...

sobre el resto sólo será cuestión de tiempo... ya verás